Sucesor del neumático de talones, los neumáticos 'convencionales', 'diagonales' o los 'bias' forman la segunda generación de neumáticos desmontables. Cuentan con dos innovaciones importantes:
La introducción del negro de humo y la aparición de cables textiles en la carcasa del neumático.
La introducción del negro de carbono, aparecido desde 1917, permite multiplicar por cinco la longevidad de los neumáticos.
La introducción de cables textiles paralelos en la carcasa del neumático supondrá en 1919 el nacimiento del neumático 'cableado' y más tarde del 'cableado confort' en 1923, primer neumático de turismo de baja presión (2,5 bares).
El 'Doble Remache' es de hecho el nombre de una escultura que recuerda el dibujo de los remaches de ensamblaje, que aparece con la primera generación de neumáticos de talón. Su perfil emblemático será conservado en los primeros neumáticos de aros Michelin, lanzados en 1925. Es esta escultura la que ha sido conservada en las 14 dimensiones de la gama Michelin Colección, para el equipamiento de numerosos vehículos fabricados antes de la guerra.
Por supuesto, los materiales utilizados en el siglo XXI para confeccionar estos neumáticos proceden de la profesional actual (Makes no sense, I cannot understand the meaning). Es necesario hinchar estos neumáticos respetando la escala de carga de presión disponible en la página 5 de nuestro catálogo técnico: es el peso aguantado por cada neumático el que la define, para tener un comportamiento óptimo en carretera y una buena longevidad.